Es una variedad de pectolita azul-celeste.
Color celeste intenso a veces traslucido, muy bueno para mejorar la comunicación.
y controlar las angustias.
Para convertirse en un niño pequeño: gozo y alegría, sabiduría e inocencia.
Abre a nuevas dimensiones.
Estimula la evolución de la Tierra.
Fomenta tranquilidad.
Induce a un profundo estado meditativo.
Eleva la conciencia de manera natural.
Armoniza cuerpo y alma a las nuevas vibraciones.
El Larimar otorga fortaleza.
Guía al alma hacia su verdadero camino en la vida.
Facilita el contacto angélico.
Facilita la curación de las relaciones de vidas pasadas
Retira los bloqueos y constricciones auto impuestos a nivel psicológico
Disuelve las conductas de auto sabotaje
Disuelve la tendencia al martirio
Ayuda a asumir el control de la propia vida
Es útil para aliviar la culpa y disipar el miedo
Aporta serenidad, claridad y pensamiento constructivo
Estimula la creatividad y anima a "seguir el flujo"
Genera calma y equilibrio
Es un antídoto de los extremos bipolares
Mejora los desórdenes bipolares
Sana los traumas del corazón
Reconecta con el espíritu juguetón y la energía alegre de la infancia
Conecta con la energía de la diosa-tierra
Ayuda a las mujeres a sintonizarse con su feminidad innata
Contrarresta los desequilibrios telúricos y las tensiones geopáticas
Retira las entidades adosadas
Estimula los chacras del tercer ojo, corazón, coronilla y garganta
Útil para las dolencias de los cartílagos y garganta
Disuelve los bloqueos energéticos del pecho, cabeza y cuello
Extrae el dolor
Puede ponerse sobre las articulaciones constreñidas o las arterias bloqueadas
Para más información http://tienda.eltallerdelosminerales.com/
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