Comencemos con sus propiedades.
La cianita es excelente para sintonizarse y meditar.
Es tranquilizante.
Transmisora y amplificadora de energías de alta frecuencia.
Estimula los dones psíquicos y la intuición.
Tiene la capacidad de sintonizar con el nivel causal, ayudando a manifestar la energía espiritual como pensamiento.
Conecta con los guías espirituales.
La cianita infunde compasión.
Aporta integridad y maduración espiritual.
Facilita el recuerdo de sueños.
Promueve los sueños curativos.
Es de ayuda para los que están haciendo la transición a la muerte.
Limpia los caminos y los meridianos.
Estabiliza el campo biomagnético después de la limpieza y la transformación.
No necesita limpieza, pues no recoge negatividad.
Anima a decir la verdad.
Ayuda a superar miedos y bloqueos.
Abre el chacra garganta.
Fomenta la auto expresión y la comunicación.
Atraviesa la ignorancia y abre a la verdad psicológica y espiritual.
Deshace la confusión.
Disipa los bloqueos, la ilusión, la cólera, la frustración y el estrés.
Incrementa la capacidad de pensar lógicamente.
Estimula la mente superior.
Ayuda a separarse de la idea de destino ciego.
Muestra el papel del yo en la creación de causas y las medidas que se requieren para equilibrar el pasado.
Facilita la ascensión atrayendo el cuerpo de luz hacia el reino físico y conectando la mente superior con las frecuencias elevadas.
Trata desórdenes musculares.
Trata fiebres.
Trata el sistema urogenital, la tiroides y paratiroides, las glándulas adrenales, la garganta y el cerebro.
Es un analgésico natural.
Rebaja la presión sanguínea.
Remedia las infecciones.
Permite abandonar el exceso de peso.
Sustenta el cerebelo y las respuestas motoras del cuerpo.
Ayuda a equilibrar la energía yin-yang.
Protege y fortalece. Aporta claridad mental.
Son aptas para trabajar las polaridades energéticas interiores.
Más información aquí: El taller de los minerales
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